Una docena con la C

La letra C no ha sido tan sumamente complicada para escoger como fué la B, que estaba repleta de intérpretes míticos, pero tampoco ha sido nada fácil. En cuanto veais la lista de descartados os podreis ya hacer idea de la calidad de los doce elegidos para la gloria.

Entre los descartados, se pueden distinguir dos tipos: los grupos famosos que, sin disgustarme del todo, tampoco llegan a entusiasmarme por una simple cuestión de gusto; y por otro lado, los que me gustan mucho pero no he considerado que debían estar entre los doce. Que los doce que elijo tampoco son exactamente mis doce favoritos, sino que intento que sea una docena heterogenea, con distintos estilos, épocas y tratando de no poner todo famosísimos sino también tratar de descubriros a algunos que no conozcais.

Entre aquellos que, siendo, o habiendo sido, grandes en ventas, a mi me han gustado pero sin volverme loco están:

- Cat Power (no está mal, pero en ese estilo prefiero a muchos otros antes)
- Centro-Matic (digo lo mismo que en la anterior)
- Coldplay (Cuatro buenas canciones en tres discos, no alcanza para estar entre los doce elegidos).
- The Corrs (Me gustaron sus dos primeros discos, desde entonces me aburren, aunque la cantante sigue siendo muy guapa)
- Cranberries (Grupo de singles. Admito tres o cuatro buenas canciones, pero ya ¿quien se acuerda de ellos?
- The Cure (Nunca me gustaron, pero admito que fué un grupo influyente e importante)

En cuanto a los que sí me gustan mucho pero he tenido que dejarlos fuera porque no caben todos están:

- Camel (rock progresivo de los 70. Muy buenos, pero dudo que os gustasen a ninguno de vosotros)
- Canned Heat (Muy grandes en los 60. Meteré algo de ellos en el recopilatorio de Fernando. Blues-rock vigoroso, con pelotas)
- Climax Blues Band (De estilo parecido a los anteriores, con discos mejor producidos, aunque algo menos rockeros)
- Country Joe & The Fish (Folk-rock psicodélico, con tres primeros discos cojonudos y luego se fueron diluyendo...)
- Cracker (Un gusto personal mío. Hacen un country-rock muy popero, sus discos son buenos y divertidos. Pondré algo suyo también en el disco)
- Czars (Grupo actual. Dream pop elegante, para escuchar con cascos y cerrar los ojos.)
- Charles Mingus (Uno de los mejores músicos de jazz de la historia. Un genio)
- Chris Bell (Creo que en el repaso a la letra B ya mencioné a Big Star. Chris Bell fué miembro de Big Star. En solitario solamente hizo un álbum, pero menudo disco. Se titula I am the cosmos, y es una joya del pop).
- Chuck Berry (Todo el mundo en pie. Chuck Berry es una leyenda viva de la música. Un rockero a la altura de Elvis Presley, pero además componiendo como los ángeles y tocando la guitarra como el más virtuoso. Míticos sus riffs mientras hacía el baile del pato. Grande Chuck).
- The Cars (Grupo típicamente ochentero, con dos o tres discos brillantes. De lo mejorcito de la década)
- Calexico (Otra debilidad personal. Rock fronterizo tex-mex. Una delicia)
- Clem Snide (Mezcla de Alt-Country con pop indie, es uno de los grupos actuales más agradables de escuchar. Discos muy cuidados).
- Cowboy Junkies (Valga el comentario anterior también para estos).
- Curt Boetcher (Otro mito del pop, al estilo de Chris Bell. Vale la pena acercarse a su música).
- Chicken Shack (Blues-rock británico de los 60s y 70s. Fué el primer grupo de Christine McVie, la componente de Fleetwood Mac. Muy buenos).
- Chris Mills (A este le conozco yo, su madre, y pocos más. Si será poco famoso, que le compro los discos directamente a él por internet y me contesta, me da las gracias, y me avisa cuando saca disco nuevo. Es un cantautor americano, casi todas las canciones en acústico. Pero bueno, bueno. Me encanta).
- Chuck Prophet (Muy bueno también. Ha ido evolucionando con el tiempo. Formó parte del grupo Green on Red, y lleva ya bastantes discos en solitario. Ha evolucionado desde el rock and roll al country rock, al folk, la americana, y últimamente en sus discos hay hasta música electrónica.)
- Counting Crows (Arrasaron en los noventa. Están bien y son bastante accesibles).


Y después del homenaje a los semifinalistas, vamos con los doce discos escogidos para la gloria de figurar en este blog:



CAROLE KING - "Tapestry"

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Una de las cantautoras más grandes -si no la más- de la historia de la música moderna. Y este "Tapestry" es, con toda seguridad, uno de los mejores discos de la historia. Editado en 1.971, es un disco absolutamente mítico. ¿Te imaginas un álbum con media docena de canciones que 37 años después todo el mundo conoce, y han sido mil veces versionadas? Pues así es este "Tapestry".
Vendió millones de discos cuando fué publicado, estuvo quince semanas en el número 1, duró más de seis años en las listas y ganó 4 premios grammy. Además, impuso el punto de vista femenino en un universo masculino como era el de la música pop (y sigue siéndolo, aunque en menor medida). Las mujeres se pudieron identificar con unas canciones tan honestas como sencillas que estaban escritas y cantadas con el corazón. La temática era universal: nostalgia, amistad, esperanza, amor/desamor…
Y no sólo en el aspecto lírico radicaba la clave del “boom” que supuso en 1971 la públicación de “Tapestry”. Músicalmente era rico por la variedad que ofrecía (soul blanco, folk, pop, aromas jazzísticos…). Era cálido y sonaba directo, sin vanos artificios. Sonaba a verdad. Era su verdad emocional.
Carole King (09-02-42, Brooklyn, New York) no era precisamente una cantautora novel cuando dio a luz a “Tapestry”, su segundo álbum en estudio. En los 60 había formado un tándem infalible con el por aquel entonces su marido Gerry Goffin. Este dúo compuso temazos del calibre de “Will You Love Me Tomorrow”, “The Locomotion”, “One Fine Day” o “Up On The Roof”. Desde los Beatles pasando por Aretha Franklin, un sinfín de artistas grabaron sus canciones.
Con el tiempo intentó montarse una carrera en solitario. Y al final salió adelante. Carole King, que curiosamente era la protagonista del “Oh! Carol” de Neil Sedaka, alcanzó el estatus de superestrella buceando en su interior, creando un disco confesional en el que demostraba que dominaba con maestría el arte de componer grandes canciones. Porque “Tapestry” carece de puntos débiles. Para empezar recupera tres gloriosas perlas de su propio pasado: “You’ve Got A Friend” (que fue un “hit” para James Taylor), “Will You Love Me Tomorrow?” (The Shirelles la bordaban) y “(You Make Me Feel Like) A Natural Woman” (Aretha Franklin la convirtió en pieza clave de su seminal “Lady Soul”). Y lo cierto es que la lectura que hace la compositora neoyorquina de ese trío de partituras es conmovedora.
Incombustibles son también los “hits”: “I Feel The Earth Move” y “It’s Too Late”. Y el resto del disco tampoco tiene desperdicio (”So Far Away”, “Where You Lead”, “Beautiful”…). En definitiva, representaba la quintaesencia de esa clase de discos que escuchas del tirón porque merece la pena de arriba abajo. Han pasado muchos años y sigue siendo un álbum imprescindible. “Tapestry” dignifica el concepto de comercial. Este disco se vendió y continúa vendiéndose porque contiene canciones inmortales. Es obvio que en multitud de ocasiones la calidad no tiene nada que ver con la comercialidad. Este es un caso en el que ambos términos casan.




CREAM - "Disraeli Gears"





Cream fué un grupo básicamente de Blues, aunque en algunas melodías son Pop, Rock o incluso Hard Rock. Aunque en este disco se encuentra un sonido mas psicodélico, que es lo que hace que el álbum se distinga.
Cream fué el grupo en el que se terminó de consagrar su guitarrista. Igual os suena. Era un tal Eric Clapton. Tras dejar los Yardbirds fundó Cream y realizó un blues psicodélico en la segunda mitad de los sesenta que los convirtió en grupo referencia para muchas generaciones.
El disco salió a la venta en Noviembre de 1967. Mis temas favoritos de este disco son Tales of Brave Ulysess, SWLABR, Outside Woman Blues y sobre todo Sunshine of Your Love.
El álbum empieza potente y pegadizo con la ya clásica pieza del grupo "Strange Brew" para continuar con el pegadizo y conocido riff de guitarra que conforma "Sunshine Of Your Love", donde Clapton deja surgir su personalidad más bluesera. "World Of Pain" es un tema tranquilo y meloso con algún que otro toque psicodélico. "Dance The Night Away" es uno de los clímax del disco. De gran factura vocal, la canción se desliza por un hipnótico clima musical. "Blue Condition" es una composición que sirve para introducirnos otro de los puntos fuertes del Lp: "Tales Of Brave Ulysses". Con música de Clapton y letra de Martin Sharp los oídos se deleitan con este corte, uno de los mejores temas del disco y de Cream. Encontramos después la lisérgica "SWLABR", cuyas siglas significan "She Was Like A Bearded Rainbow". El tema más psicodélico del disco y puede que de la banda. Y llegamos a la que puede que sea la canción más sentimental: "We're Going Wrong", de Jack Bruce. En esta pieza quedan sobradamente demostradas las dotes vocales del mismo. Una de las joyas del disco que a menudo pasa algo desapercibida.
El final del disco es predominantemente bluesero: "Outside Woman Blues", "Take It Back" y la experimental "Mother's Lament" nos dejan un sabor de boca inmejorable. Estamos frente a uno de los discos clave de los '60 ya que Cream fusionó con éxito todo el pupurrí de estilos que predominaban en esos años. Trabajo de enorme impacto desde la portada hasta la nota final, este Disraeli Gears merece ser catalogado como obra maestra e imprescindible para entender todo lo que ocurrió después.





CURTIS MAYFIELD - "Curtis"




Aviso para dejar clara una cosa: Este disco no gustará a todos. Es un disco difícil para los no introducidos en el Soul-funk. Yo aconsejo escucharlo a todos, pero no aseguro el éxito en todos los casos.
Es uno de esos discos que parecen no sufrir el desgaste del tiempo ni de las modas. Y para mi, este disco que Curtis Mayfield publicó en 1970, y que significó su debut en solitario, tras abandonar a los Impressions , es uno de ellos.
"Curtis" es una obra impresionante, donde ese elegante y cuidado soul vocal de profundas raíces gospel, que Curtis Mayfield había ido desarrollando junto a The Impressions a lo largo de los 60, alcanza sus cotas más altas de belleza y barroquismo instrumental, sin perder un ápice de emotividad vocal, y ganando una fuerza e intensidad inusitada en sus momentos más raciales, imbuidos del
poderoso aroma funk que irrumpía con descaro y arrogancia dentro de la música a comienzos de los 70.
Intensidad y rabia con las que Curtis Mayfield inicia el disco. ¡Que fuerza desprende "(Don’t worry) If there’s hell below we’re all gonna do"! . ¡Que manera de abrir el disco! Ritmo funk con un bajo endiablado, wah wah wahs envolventes, y hasta lujosas cuerdas que dan un aire señorial a un tema arrebatador. ¿Quién puede resistirse a ese contagioso ritmo de guitarra y bajo, avivado por esos vigorosos riffs de vientos que sobrevuelan esas contundentes percusiones de tipo latino? Estos ocho minutos y cincuenta y tres segundos de frenesí absoluto, dedicados al baile más entusiasta, que te dejará sin aliento, son uno de los momentos más gloriosos de la historia de la música soul.
Soul, palabra mágica que en lo musical es sinónimo de emoción y desgarro, aunque también de sensibilidad y ternura. Facetas ambas en las que Curtis Mayfield nos demuestra que es un maestro, y que incluso es capaz de aglutinar en un mismo tema. Que no te lo crees, pues ahí tienes "We the people who are darker than blue" , sincera y tierna en su comienzo y final. Una delicadeza y ternura que resplandecen sobre cuidados arreglos orquestales y una exquisitez vocal sin igual en temas como la nostálgica "The other side of town" , la dulce "The Making of you" y la encantadoras "Miss Black America" y "Give it up". Joyas que engrandecen este clásico del soul más comprometido y racial que tiene en la exuberante "Wild and free" otro de sus puntos álgidos y que no deberíais perderos.




CAPTAIN BEEFHEART - "Safe as milk"





Captain Beefheart, nombre artístico de Don Van Vliet, fué un genio innovador de los años 60. Influenciado por el free jazz, sus composiciones se caracterizan por inesperados cambios de tiempo, ritmos al revés, melodías surrealistas y disonancias. Basándose en el blues-rock, yo creo que fué uno de los primeros artistas experimentales del rock, a la altura de Frank Zappa.
Este "Safe as milk", primer álbum de Captain Beefheart, podría definirse como una interpretación vanguardista del blues eléctrico... si no fuera porque es muchísimo más que eso. Me explico: la excentricidad de Don Van Vliet funciona como un espíritu que revolotea por todo este primer disco, gritando, susurrando, gruñendo y chillando creaciones demenciales con cierto aire señorial, mientras su increíble banda recorre blues, canciones con toques de pop, rock, creativas y cortas secciones instrumentales y mucha, mucha electricidad.
La experimentalidad está constantemente presente en este disco y, si bien Captain Beefheart alcanzaría su máximo pico de popularidad -y, tal vez, de innovación- con su álbum de 1969 "Trout mask replica", esta sigue siendo una suerte de "obra maestra olvidada", dueña de un sonido híper-sucio que el músico jamás volvería a tener. Beats furiosos, jugueteos eléctricos, arreglos caóticos, un par de estribillos gritados a coro, toques de psicodelia y alguna que otra composición pop relativamente amena -"I'm Glad", por ejemplo- son algunos de los muchísimos ingredientes de este magnífico disco. Se dice que, por aquel entonces, era uno de los discos favoritos de John Lennon, y no es difícil darse cuenta de qué le encontraba de atractivo: si hoy es más que interesante tenerlo en cuenta al inspeccionar la evolución que vivió el blues-rock durante mediados/finales de los años 60s, no quiero ni imaginarme cómo debió haberse sentido descubrirlo por aquellos días, con toda su frescura, imaginación y delirio creativo.





COSMIC ROUGH RIDERS - "Enjoy the melodic sunshine"




Los Cosmic Rough Riders es uno de esos grupos actuales que me hacen ir a los conciertos. Una banda moderna que vale la pena, y no hay tantas. Este disco concretamente es de 2003.
Después de conocerlos al escuchar uno de sus sorprendentes singles (“The pain inside”) no dudé en hacerme con este maravilloso álbum, que poco a poco te va atrapando más (aunque he de reconocer que en una primera escucha me esperaba algo más). Dosis de psicodelia new-folk-country en forma de preciosas y adictivas canciones, adornadas con sitares y percusiones, que le dan ese toque psicodélico, aunque el sonido general del disco cuida más las melodías que las atmósferas lisérgicas, y es que tiene un sonido bastante 60, y recuerda a muchas de las mejores bandas de la época, pero siempre está más cerca de grupos que ponen un especial énfasis en el cuidado de las armonías, como THE BYRDS, y es que sus canciones gozan de luminosos armonías vocales, arropadas por cristalinas y brillantes guitarras acústicas. Recuerdan en bastantes momentos también a Teenage Fanclub, y es que ambos grupos beben de las mismas fuentes pop de los 60.
Mis favoritas: "Revolution (in the summertime?)", "Baby, you´re so free", "The pain inside" y "Sometime".





CROWDED HOUSE - "Woodface"




Grupo neozelandés, que apareció en los años ochenta, se separaron en 1993, grabaron muy pocos discos, pero con apenas cuatro discos clavaron ocho o diez hits absolutos. El grupo de los hermanos Finn marcaron época con sus canciones primero ochenteras y luego intermporales. Al principio no me gustaban, sus canciones que ponían en la radio me parecían demasiado comerciales y con una calidad pobre. Pero cuando me liberé un poco de ese prejuicio contra las radiofórmulas descubrí un grupo con clase, quizá demasiado maccartniano ("Four seasons in one day", a cualquiera que se la pongas y no la conozca, te dice que es Paul McCartney, fijo), pero con personalidad propia.
Este "Woodface" es la prueba de que este grupo era más que "Don't Dream It's Over". Si te gustan los discos con canciones que son placeres inmediatos, hazte con este CD cuanto antes.




CAMERA OBSCURA - "Underachievers Please Try Harder"





Grupo escocés de la actualidad, en la línea de Belle & Sebastian. Hay quien dice despectivamente que son iguales. No estoy de acuerdo. Es cierto que tienen muchas similitudes y hacen el mismo tipo de música, pero Camera Obscura tienen rasgos únicos de los que te das cuenta si profundizas mínimamente en su música.
Este "Underachievers Please Try Harder", es para mí su disco más completo y redondo , plagado de sencillas y dulces melodías retros, con toques clásicos que recuerdan a Love o Gram Parsons.
En menos de cuarenta minutos encontramos la edulcorada melancolía de piezas como “Teenager”, “Suspended From Class” o “Your Sister's Social Agony”, las bailables y pegadizas “Let Me Go Home” y “Number One Son” o la tristes “Your Picture” y “Books Written For Girls”.
Camera Obscura es una de esas bandas ideal para pasar la primavera o el dia de San Valentin. Totalmente Fall in Love y esas cosas. La critica los ha denominado como: "Pop de Camara", que me parece una definición bastante acertada. Underachievers Please Try Harder, es el tercer disco de la banda. Para resumir diría que es un disco melódico de los que no aburren.




THE CLASH - "London calling"





Supongo que a estos británicos liderados por el gran Joe Strummer ya los conoceis sobradamente, aunque solo sea por la mítica "Should I stay or should I go". Pero nunca está de más ponderar una de las mejores bandas de la historia, y a su disco bandera indiscutiblemente.
Y es que si tuvierais que escuchar un disco de The Clash en vuestras vidas, tiene que ser "London Calling". La revista Rolling Stone lo consideró el octavo mejor disco de toda la historia (por encima de The White Album, Nevermind, Thriller, The Joshua Tree y The Dark Side of the Moon) y su portada -copia del álbum debut de Elvis pero con el bajista Paul Simonon a punto de romper su bajo en el clímax de un concierto- fue votada hace poco como el símbolo más icónico del rock. Pero dejando al lado esto, London Calling es simplemente un álbum sensacional. Aunque no lo parezca, es un disco decididamente anti-punk. El único rastro del moribuundo género que los vio nacer es en la canción homónima “London Calling” por su ritmo marcial y letra apocalíptica pero atrevida. Sin embargo, las siguientes 18 canciones son una auténtica montaña rusa de estilos. Predomina el rockabilly en las excelentes “Brand New Cadillac”, “Hateful” y “Rudie Can’t Fail”. El reggae en “The Guns of Brixton” y “Revolution Rock”; pop en “Spanish Bombs”, “Lost in the Supermaket” y “I’m Not Down”. Pero con lo buenas que son estas canciones hay dos que merecen atención especial. La primera es “Clampdown”, un himno revolucionario que resume la enardecida causa política de estos londinenses. La segunda es “Train In Vain”, grabada de último minuto y es una agridulce balada pop, una de varias cantadas por Mick Jones (cuyas vocales afeminadas hacen un perfecto complemento a la áspera voz de Strummer) que además se convirtió en su primer súper-éxito comercial.
En fin, "London Calling" es la expresión de una banda buscando inspiración y encontrando a la vez la cúspide de su propia magnificencia. Discazo imprescindible.




CROSBY, STILLS, NASH & YOUNG - "Deja Vu"




David Crosby, Stephen Stills, Graham Nash y Neil Young formaron uno de los cuartetos más impresionantes e inigualables de la historia. La mayoría del tiempo, este grupo lo formaron solo los tres primeros, pero Neil Young se unió a ellos para este sensacional y mítico "Deja Vu", que no debes perderte por nada. Es uno de mis discos favoritos de la vida.
Desertores de varias de las bandas legendarias de los 60, David Crosby (The Byrds), Stephen Stills (Buffalo Springfield) Y Graham Nash (The Hollies), se conocen en una fiesta en la casa de Mama Cass Elliot (la gordita que cantaba en THE MAMAS AND THE PAPAS), y deciden armar lo que en esa época se denominaba ¨supergrupo¨ (por incluir varios músicos de renombre), uno de los primeros existentes que realizan un segundo show nada menos que en... Woodstock 1969!
En 1970, se une a la banda un amigo en común: Neil Young (viejo compañero de Stills en la época de Buffalo Springfield), y editan ¨Deja Vu¨, su segundo disco, donde se convierten en una máquina rockera y aceitada, demostrando toda su capacidad en temazos como "Almost cut my hair", "Woodstock", "Everybody I love you", Tremendas canciones folkies como "Carry on", "Teach your children"(con la participación de Jerry García, de los Grateful Dead) y un Neil Young frágil y acústico en "Helpless".
Al ser un disco antiguo su minutaje no excede los 40 minutos y puede que esa sea una de las razones por las que está tan lleno de maravillas. Todos los temas del disco son sobresalientes, pero en especial yo destacaría "Teach Your Children", la épica "Helpless" (de lo mejor que ha escrito Neil Young en su vida, y eso es mucho decir), y la preciosísima-hasta-decir-basta "Our House".
No puedo evitar escuchar a estos cuatro tios cantando a voces, con esas guitarras acústicas (y a veces no tan acústicas) y recordar mi adolescencia y los discos de vinilo. Sí, vale, es un disco que produce nostalgia, hippismo y una sensación bastante retro, pero viendo lo que suena hoy en día no podría ser más adecuado para esta época que vivimos, y no puede sonar más atemporal. Maravilloso.






CHEAP TRICK - "Heaven tonight"





Los Cheap Trick son una de las bandas de rock más desconocidas en España a pesar de ser un grupo veterano. Estos titanes del rock llevan en esto de la música desde finales de los años 60 y aún siguen grabando y haciendo giras, pese a que su carrera nunca terminó de explotar, y no llegaron a tener el éxito que a mi juicio deberían haber tenido.
¿Encuentras que a los Beatles les falta "punch" guitarrero? ¿Consideras que a "AC/DC" les falta melodía? Entonces Cheap Trick es tú grupo. Surgídos a finales de los años sesenta y logrando una gran mezcolanza de estílos que da como resultado un sonído personal guitarrero pero aderezado por mucha melodía y buenos arreglos vocales, se caracterízan por tener una mejor colección de canciones que de díscos: los más recomendables son los setenteros "In Color", este "Heaven tonight" que aquí os presento, y "Dream Police", además del directo "At Budokan", que irónicamente les empezó a granjear fama en su país, Estados Unidos, de la que hasta entonces carecían. En cuanto a temas, por encima de todos: "Surrender", una canción de éxito instantáneo, de aquellas que no se te van de la cabeza en cuanto las escuchas una vez.




CAT STEVENS - "Tea for the Tillerman"




Ya sabeis que yo soy mucho de cantautores. Me gustan esos tipos introspectivos que agarran una guitarra y se dedican a componer canciones en la soledad de su habitación (o así me los imagino)expresando así sus emociones, convirtiendo sus sentimientos en canciones. Por supuesto, como en todo, los hay muy buenos (algún genio incluso), regulares, y malos. Hay mucho intruso en esto, mucho inepto disfrazado de cantautor que se sube al carro, o que sacan una canción de suerte y viven de ella hasta que se olvida la gente. Hay que tamizar bien para quedarse con lo que vale la pena y no perder el tiempo con los demás. De entre los más clásicos yo me quedo con dos británicos (Dylan no cuenta): Donovan y Cat Stevens.
Hijo de griego y sueca, nacido en Londres, Cat Stevens en realidad se llama Steven Demetre Georgiou, aunque desde hace muchos años se cambió de nombre y ahora se hace llamar Yusuf Islam. Pero vamos a su música, que es lo que nos interesa de él.
Hizo dos discos absolutamente maravillosos: este "Tea for the tillerman", del año 1970, y "Teaser and the firecat", del año siguiente. Luego bajó un poco el rendimiento, era imposible seguir a ese nivel creativo porque esos dos discos son verdaderamente insuperables, y en 1978, cuando estaba en la cima de su carrera, lo abandonó todo por el rollo del Islam y desapareció del mapa. A finales de los 90 regresó convertido en Yusuf Islam, y ha grabado cuatro nuevos discos, buenos todos ellos, recomendables, pero sin llegar a esa cumbre que alcanzó a principios de los 70.
"Tea for the tillerman" es una preciosidad, y se hace complicado elegir las mejores canciones, porque todas tienen un gran nivel. Personalmente me quedo con la subyugante "Father and son", seguida muy de cerca por "Hard headed woman" y "Where do the children play", aunque probablemente la que más éxito tuvo en su día fué "Wild world", muchas veces versionada.



CREEDENCE CLEARWATER REVIVAL - "Cosmo's factory"




Un puñetazo en el estómago. Un muro sónico. Y por supuesto, aguas pantanosas. Siempre el sonido casi sólido y húmedo que nos trasporta a lugares de lluvias abundantes y ritmos acordes, de cerveza tibia y blues añejo. Estoy hablando del Rock Sureño y estoy hablando de los Creedence (la Cridens, como me la nombraron por primera vez, con aquella cinta TDK roja). Hay grupos de Sureño que lideran éste estilo por méritos propios: mis amados Allman, los gamberros Skynyrd, etc. pero los Creedence tenían un sonido único, cristalino, embriagador. De hecho mucha gente conoce de oídas sus canciones sin tener ni puta idea de quiénes son, y sin poder evitar un ligero movimiento rítmico cefálico, así como un tarareo involuntario de las notas (reconozcamos que esto es difícil de conseguir). Los hermanos Fogerty, Tom y sobre todo John, Doug Clifford y Stu Cook, sabían lo que se hacían.
Y siempre que escucho a los Creedence (muy a menudo) me acuerdo del Notas, el gran amigo Lebowsky, ese personaje encarnado de forma magistralmente entrañable por Jeff Bridges, capaz de lamentar el robo de su coche sólo porque en él iban unos casettes de los Creedence.
Y en fin, aquí tenemos su gran disco: "Cosmo's factory", un soplo de aire fresco con esta factoría de música atronadora: escuchad sin ir más lejos el tema que abre el disco, "Ramble Tamble", para saber de lo que hablo, y sujétaos al asiento, siete minutos que te dejan sin aliento para pasar por un r'n'r clasicón. "Before You Accuse Me", a la segunda descarga. Luego "Travellin Band" (que por cierto apesta a single de éxito) y revisitar el ritmo rocanrolero con "Ooby Dooby". Aires country con el clásico "Lookin´Out My Back Door" y ambiente tétrico con el inicio de "Run Through The Jungle", volviéndome a remitir a la película de los Cohen. "Up Around The Bend" es un jodido clásico del Rock, sin apelativos, para seguir con otra versión de r'n'r, "My Babe Left Me". Luego nos llega la cálida lluvia incesante con "Who´ll Stop The Rain", otro clásico imparable, que parece haber habitado en nuestro subconsciente hasta revisitarlo con las primeras notas. Y el plato fuerte del LP, la versión que hizo famosa Marvin Gaye (antes de sus "What´s Goin On" y "Let´s Get It On", apabullantes, otra historia), pero con una considerable vuelta de rosca: 11 de minutaje con un sonido envolvente que no te suelta hasta el final, cuando se va apagando lentamente, y título pomposo, "I Heard It Through The Grapevine". Hasta llegar a la balada del disco, para terminar, "Long As I Can See The Light", impagable.
Si te consideras un amante de la música Rock seguro que ya los conoces; de lo contrario, tienes suerte, aún no has descubierto a los Creedence.