Antes de empezar con la música, un par de cosas rápidas: La semana que viene podeis hacer cambios en vuestros equipos de Liga Fantasticongóstica. Podeis hacer hasta tres cmabios por equipo. Los cambios se hacen mediante mensaje privado a mí, por email, telefono, o como os de la gana, pero en privado. Afinad bien porque después ya no se podrán hacer más cambios hasta mediados de Diciembre.
Las apuestas de esta semana las pondré el viernes por la noche o el sábado por la mañana. Tras el fracaso de la semana pasada, el saldo actual queda en 121,65 €. Si alguien quiere alguna apuesta en concreto, lo diga.
Dicho esto, vamos con esta sección discográfica que tanto os gusta, por mucho que disimuleis, que se yo que no os perdeis detalle...
La G no es de las letras más prolíficas si hablamos de esa letra como inicial de cantantes o grupos. Y el punto G es un mito, que lo sepais.
Vamos con los descartes. Hay tres que se han quedado fuera, pero han estado luchando hasta el final por entrar entre los doce elegidos, y hay un grupo que no me gusta nada, pero reconozco que ha sido importante y tengo que citarlos. Empezaré por estos últimos.
- GREEN DAY.- Mucho ruido y pocas nueces. Nunca me gustaron, no tienen sustancia. Un post punk mal entendido, a mi juicio. Lo único bueno de sus canciones es que son cortas.
- GOLDEN SMOG.- Me gustan mucho. Country-rock alternativo, en la onda de los Jayhawks o los primeros Wilco. Mi recomendación discográfica de ellos se titula "Dawn by the old mainstream". Echadle un oído.
- THE GUESS WHO.- Mítica banda canadiense de los sesenta y primeros setenta. Hoy en día son casi únicamente conocidos por su éxito atemporal "American woman", canción versionada hasta la saciedad. Pese a esta canción, contenida en su disco del mismo nombre, yo prefiero su álbum "Canned wheat".
- GENE CLARK.- Miembro de los Byrds, Gene Clark desarrolló una brillante carrera en solitario editando bastantes discos, al menos tres de ellos fantásticos, aunque también digo que dudo que os gusten. Para mí, el mejor es el "No other".
Y vamos ya con los doce mejores de esta letra.
GIGOLO AUNTS - "Minor chords and major songs".
Junto con los Fountains of Wayne y los Teenage Fan Club, los Gigolo Aunts completan mi terceto de grupos de power pop favoritos. Este grupo de Boston tiene la particularidad de que en catorce años de existencia grabaron solamente cuatro discos. Dos de ellos, grandiosos. "Flippin' out", que estuve hasta el último minuto a punto de meterle en lugar de éste, porque la verdad es que ambos me encantan, y este de título tan original "Minor chords and major themes".
El grupo se caracteriza básicamente por unas magníficas composiciones y unas más que correctas interpretaciones, especialmente en lo relativo a la parte vocal. Este disco en concreto es, posiblemente, el más guitarrero de su discografía. Pero sobre todo me gusta porque es un disco muy variado, con canciones poderosas como la que abre el disco ("C'mon c'mon") hasta otras melancólicas como "Everithing is wrong".
Además de bueno, es un disco que creo que resulta bastante accesible para todo tipo de oídos, por lo que recomiendo vívamente su escucha a todos, incluso los no iniciados.
GENESIS - "Selling England By The Pound"
Genesis han sido, más allá del gusto de cada cual, uno de los grupos más grandes de la historia. Yo tuve una época en que fuí muy fan suyo. Me gustaban muchísimo sus primeros discos, desde el "From Genesis to Revelation", con aquella mítica portada, hasta el formidable disco doble "The lamb lies down on Broadway", pasando por joyas como "Foxtrot", "Trespass", o el que finalmente he elegido como representante de este grupo, auténtico grupo de referencia de lo que se llamó el rock progresivo.
Con su formación original, con Peter Gabriel, Tony Banks, Phil Collins, Michael Rutherford y Steve Hackett, Genesis hizo auténticas maravillas tanto en el aspecto lírico como en el puramente melódico de sus temas. Es cierto que, el tiempo, el éxito mal digerido, y sobre todo la marcha de Peter Gabriel y el definitivo liderazgo de Phil Collins hizo que el estilo y la calidad del grupo fueran derivando hacia otra cosa y degeneraran definitivamente en los años ochenta. A partir de ahí dejaron de interesarme para siempre. Pero vayamos con este disco, que es pura crema.
“Dancing With The Moonlit Knight” en la canción que abre el disco, dejando claro que Genesis están dispuestos a que esto sea algo grandioso desde el pistoletazo de salida. La intro es extraordinaria: Gabriel cantando a capella mientras los instrumentos se unen, uno a uno, lentamente. El resto de la canción fluye entre notas de flauta, acordes medievales y la maravillosa guitarra de Steve Hackett. De lo mejor del álbum.
“I Know What I Like (In Your Wardrobe)” es el siguiente tema. Una buena canción corta que encaja a la perfección en el disco. Se trató del primer single de la banda en luchar por los puestos altos de las listas de éxito, hecho significativo si tenemos en cuenta que el rock progresivo nunca se caracterizó por ser especialmente popular. Es muy difícil que una canción de este estilo la pongan en la radio.
La tercera canción del disco es definitiva: “Firth of Fifth”. En dos palabras: SIMPLEMENTE EXTRAORDINARIA. Demoledora desde todos los puntos de vista, alcanza el clímax en su parte instrumental con 3 solos seguidos: de flauta (Gabriel), teclado (Banks) y guitarra (Hackett).
Mientras nos recuperamos de tamaño viaje llega “More Fool Me”, una balada con guitarra acústica, nada especial a no ser por el hecho de que es el frutero (Phil Collins) el que la canta.
Luego viene “The Battle of Epping Forest” una de las mejores canciones del álbum (lo cual es decir mucho pues éste se encuentra repleto de obras maestras). Excelente perfomance de toda la banda en su conjunto, entregándonos uno de los momentos más hermosos del rock sinfónico progresivo. Eso si, el temita dura más de once minutos. Once gloriosos minutos de maravillosa música.
La siguiente es “After the Ordeal”, un tema instrumental increíble, muy bueno (se me empiezan a acabar los adjetivos) y aunque de corta duración (cuatro minutos, para una canción de Genesis es poco) le sirve a Steve Hackett para demostrar ese enorme talento que posee con la guitarra. Es emocionante escuchar música tan buena.
Y así llegamos a los 2 últimos temas: “The Cinema Show” es otro tema de once minutos, prácticamente una novela con música. Alrededor del minuto 6 viene algo insólito: un solo de teclado de Tony Banks que dura casi 5 minutos pero uno quisiera que fuese para toda la vida. Hacia el final de la canción el teclado se desvanece poco a poco mientras escuchamos la guitarra medieval nuevamente. Que maravilla lo que logran Gabriel y compañía.
Y todo acaba con “Aisle of Plenty”, que básicamente un reprise del primer tema. Y, al igual que en ese primer corte, aquí también destaca mucho la interpretación de Peter Gabriel. Un magnífico cierre de álbum. Se que no lo escuchareis. Y, lo que es peor: si alguien lo escucha no le gustará. Si eso ocurre, perseverad. Será que aún no estais preparados para tanta belleza.
GRAND DRIVE - "Grand Drive"
Descubrí a Grand Drive por pura casualidad. En mi época más country me puse a escuchar este disco por su portada, que me sonaba a country. En principio me desilusioné un poco, pero en seguida me alegré del error. A veces, equivocándose, uno acierta. A caballo entre el pop y el americana, Grand Drive me cautivó desde el minuto uno con este disco magnífico. Desde la canción que abre el disco, "Firefly", que tiene un toque country muy interesante y un aire a Neil Young que me encanta.
El resto del disco es igualmente disfrutable. Por ejemplo, me gusta muchísimo "Needle in the groove", un pedazo de canción difícilmente clasificable. "A little like you" es una delicia absoluta. Hay que tener el corazón de madera y el oído tapado para no apreciarla. "Sleepy" es un medio tiempo con aires de soul-pop sesentero, tremendamente agradable. También me gusta mucho "Tell it like it is", probablemente lo más cerca del rock que está Grand Drive en este disco.
En fin, un disco sorprendente y espectacular. Lo recomiendo fervorosamente. Vamos, malditas sordas, ¿a que esperais?
GOV'T MULE - "Dose"
Cambio de tercio total. Gov´t Mule es un grupo de esos de bourbon y sudor. Blues-rock auténtico, como el de toda la vida, pero hecho ahora, en los dosmiles. Mucho me he pensado qué disco poner de esta magnífica banda liderada por el gordo Warren Haynes, y finalmente me he quedado con este "Dose", igual que podría habere quedado perfectamente con el genial "The Deep end" o con "Life before insanity". Porque una cosa caracteriza a la Mula: nunca defraudan. Sus discos son buenos o muy buenos, pero no bajan de ahí. Solo saben hacer buen rock.
"Dose" fue el segundo disco de estudio de este magnífico trío. Su sonido es duro y eléctrico, y se nota por todas partes cómo disfrutaban grabándolo. Un álbum lleno de blues y con reminiscencias setenteras a ZZ Top y Allman Brothers.
Temas sólidos (rozando el hard) de rock telúrico siempre bebiendo del sur, incluida una versión de los Beatles ("She said, she said"). A destacar, siendo todo el disco de muy alto nivel, "Blind man in the dark" (bestial), "Thorazine shuffle" (un clásico de sus conciertos), "Thelonious Beck" (vaya jueguecito de nombres), el poderoso "Towering fool" y el clásico "John the revelator".
GEORGE HARRISON - "All things must pass"
Que los Beatles estaban deseando separarse es un hecho probado. Y la mayor prueba, para mi, son sus primeros discos en solitario. Tanto Lennon como Macca hicieron brillantes debuts en solitario, y George Harrison no se iba a quedar atrás. En 1970 publicó este sensacional disco triple: "All things must pass". Una auténtica maravilla.
"All Things Must Pass" ubicó a George Harrison en su justo lugar como compositor e intérprete, en la cima del pop mundial. Muchas de las canciones fueron compuestas años antes, pero no vieron la luz en su momento porque competían con la obra de Lennon y McCartney dentro del entorno de los Beatles.
Atención al elenco de colaboradores del álbum: Ringo Starr, Jim Gordon, Alan White, Klaus Voorman, Carl Radle, Gary Wright, Bobby Whitlock, Billy Preston, Gary Brooker, Pete Drake, Eric Clapton, Dave Mason, Bobby Keys, Jim Price, Badfinger y Ry Cooder. Por cierto, el disco está producido nada menos que por Phil Spector.
Por hablar de algunas de sus principales canciones (hacerlo de todas sería muy extenso), se pueden citar las siguientes: "My sweet lord" se trata del tema estrella del disco, alcanzando las más altas cotas de éxito. Posteriormente sufrió una querella por plagio de un viejo tema, siendo encontrado culpable de “plagio inconsciente” por lo que se vió obligado a compartir parte de los royalties embolsados.
"Isn’t a pity", del que se incluyen dos versiones, se trata de uno de esos temas que nos traen a la cabeza a los Beatles (cuenta con un larguísimo final en el mismo estilo que Hey Jude). No es el único, "Wah-wah" también recuerda a la época pop del "Revolver", y "All things must pass", que da título al disco, que apareció publicado recientemente en la colección Anthology de los Beatles (lo cual hace inútil realizar más comentarios al respecto).
"Run of the mill", "Ballad Of Sir Frankie Crisp" y "Beware of darkness", son mis temas favoritos, sobre todo el último, que me parece precioso. En ellos de nuevo hace acto de presencia la filosofía hindú y la instropección. Se trata de canciones al estilo de los temas lentos que Harrison incluyó en Abbey Road (es inevitable recordar "Something" y "Here comes the sun").
En definitiva, creo que se trata de un disco que no decepcionará a ningún aficionado a los Beatles, pues su sonido (y parte de su repertorio) es heredero directo suyo. Pero al mismo tiempo, aunque parezca paradójico, auguro que gustará también a aquellos que no son demasiado fans de los Fab Four. Así de bueno es el disco.
GRATEFUL DEAD - "American Beauty"
Lo primero de todo es apresurarme a decir que este álbum se editó en 1.970, por lo que queda automáticamente descartada la posibilidad de que esté inspirado en la película del mismo título. Que seguro que más de uno (o todos) conoceis este título por la peli y solo por ella.
Pues que sepais que Grateful Dead era una banda cojonuda, liderada por el gran Jerry García. Es muy difícil encasillar su peculiar estilo a una simple denominación, debido a que sus influencias son muchas y sus composiciones tienen rastros de Jazz, Blues, Rock, Folk, R&B, Psicodelia, Country, etcétera. Lo suyo era música, como si solo hubiera un estilo: el hacer buena música.
"American Beauty" es un disco excepcional, repleto de matices, que se reinventa cada vez que se escucha. Desde la primera vez que lo escuché me quedé asombrado. Son cientos los detalles que entretejen esa superficie sencilla y minimalista. Y es que los Grateful Dead tenían esa peculiar forma de hacer música, eran virtuosos y barrocos. Es cierto que sus voces no son las de Crosby, STills y Nash, pero las melodías desplegadas son asombrosas. "Attics of my Life" resulta impactante con su coro pseudo a capella, independiente de la base instrumental. Rítmicamente, cada canción se construye sobre un ritmo distinto, rico en matices que lo hacen complejo pero efectivo. "Sugar Magnolia" y "Operator" son dos buenos ejemplos. En el aspecto armónico, la profusión de líneas melódicas sostenidas por las guitarras, los teclados y el bajo es sorprendente. Todavía resulta más increible que ese bombardeo no sature. Se trata de pequeñas aportaciones que cada músico realiza y que terminan por configurar la armonía de las canciones. "Friend of the Devil" o "Ripple" son una excelente muestra de ese lujo.
En definitiva, un discazo para toda la vida, que casi 40 años después suena joven. Especialmente recomendable si te gustan los grupos de folk-rock psicodélicos tipo Byrds, pero igualmente disfrutable para todos los paladares.
GRAM PARSOSN - "Grievous Angel"
Gram Parsons es un mito. Uno de los personajes más carismáticos de la música, y sin duda uno de los padres del Country-rock. Con una sensibilidad fuera de lo común, Gram Parsons partió del rock para acercarse al Country de gente como Hank Williams o Johnny Cash y sus historias de perdedores, alcohol, muerte y mujeres. Fué miembro de Los Byrds, a los que se incorporó para sustituir a David Crosby. El primer disco de los Byrds con Parsons ("Sweetheart of the rodeo") supuso un cambio de estilo en los Byrds, que se volvieron menos psicodélicos y más country.
Pero tras este disco, Parsons dejó los Byrds y se formó una nueva banda: Los Flying Burrito Brothers, con los que grabaría dos magníficos discos antes de abandonar también esa banda y comenzar su carrera en solitario.
El disco del que hablamos, "Grievous Angel", se editó en 1974 y fué su segundo disco en solitario. Contiene maravillosas canciones entre las que destaco por encima de todas la esencial, bella e hiper depresiva "In the hour of darkness". También son auténticas maravillas la hermosa "Brass buttons", la bailable (a pesar del título) "I can't dance", y la excelente versión del "Love hurts".
Gram Parsons, como tantos otros, un buen día decidió quitarse la vida y convertirse en mito de la música. Y discos como este dan fe de que lo es. Sin duda.
GORKY'S ZYGOTIC MYNCI - "How I long to feel that summer"
Aqui tenemos un grupo distinto de casi todos los que he ido recomendando en todos estos posts musicales. De hecho, si tuviera que juzgarles solo por su estilo, probablemente no me gustarían. Pero yo procuro no dejarme influir por eso, intento que me gusten el mayor número posible de estilos, y así puedo disfrutar de grupos como este. Con un sonido que resulta un cruce estrafalariamente dulce y fantasioso de rock progresivo, psicodelia, y puro pop, Gorky's Zygotic Mynci fueron una de las más originales y distintivas bandas surgidas del vital período post-Brit-pop de la escena galesa de mitad de los 90.
La música de Gorky's sigue unos patrones nada convencionales en su estilo, en su instrumentación (que abarca desde repetitivos sintetizadores hasta momentos de trombón o steel guitar) y en sus pautas melódicas. Además, sus letras raramente se acercan a los habituales temas del pop o el rock, y muchas de ellas son cantadas en galés, lo que convierte su ya de por sí extravagante música en alienígena para muchos oyentes, a pesar de lo cual, los Gorky's se han ido convirtiendo en un grupo de culto, seguido con fervor por sus incondicionales, tanto en las Islas Británicas como en Norteamérica. Junto con los Super Furry Animals y los Manic Street Preachers, fueron el grupo galés más popular en los noventa.
"How I long to feel thar summer" es el séptimo disco de la banda. No ha sido fácil elegirlo, puesto que "Spanish dance troupe" o "Barafundle" son discos igualmente magistrales, que podrían perfectamente ser los escogidos.
En cuanto a las canciones más destacadas del disco, están la que abre el álbum, "Where does yer go now", que es la canción perfecta para abrir el disco. Asienta el tono del álbum. Destacan los arreglos y la forma en la que utilizan las armonías vocales. Es hechizante. Me gusta especialmente la parte de banjo.
También me gustan mucho "Stood on gold", que fué el primer single del disco, "Let those blue skies", y mi favorita, la que da título al disco: "How I long to feel that summer", un precioso tema lento.
En definitiva, un disco elegante que sorprenderá a más de uno, de un grupo más que interesante.
GUNS N'ROSES - "Appetite for destruction"
Pocas veces un grupo ha conseguido tanto con tan poco. Digo esto porque los Guns n'roses han pasado ya a la historia de la música como uno de los grandes, cuando en realidad solo han grabado un par de discos buenos. Este "Appetite" que es un auténtico discazo, y aproximadamente la mitad del "Use your ilusion", que tenía dos partes, y que si hubieran hecho uno solo con lo mejor de los dos les habría quedado otra maravilla. Pero el resto de su discografía es escasa y mala. Especialmente ese engendro llamado "The spaghetti incident", un disco verdaderamente indigno. Pero bueno, no estamos aquí para contar lo malo sino para glosar discos gloriosos. Y os aseguro que este "Appetite for destruction" es un disco sensacional, a la altura de los mejores de la historia del hard rock.
Fué el disco de debut de la banda, editado en 1.987, y batió todos los records de venta, con 15 millones de copias vendidas sólo en Estados Unidos.
Los Guns llegaron en un momento (finales de los ochenta) en que el rock duro apenas se hacía. Lo que quedaba eran algunas bandas que mezclaban el heavy con el pop (Bon Jovi o Van Halen, por ejemplo), u otras que le daban un toque glam (Motley Crue, Poison...), así que la irrupción de este grupo al más puro estilo zeppeliniano fué todo un bombazo en su tiempo. Si a eso le añadimos que su disco de debut era sencillamente genial, no es extraño que sea un grupo que ha logrado una fama espectacular, muy por encima de su producción objetiva.
Los temas más destacados del álbum son:
- "Welcome to the jungle". La maravillosa canción que abre el disco. Fue lo primero que se conoció de GNR. Las guitarras son devastadoras y con este tema los Gunners dictaron cátedra de hard rock. Una canción imprescindible y siempre vigente.
- "Paradise city", otro gran tema, que cuenta con la particularidad de incluir un teclado (Idea de Rose), que es un elemento extraño en el disco.
- "My Michelle", que tiene una intro onírica que luego explota en un monstruoso riff de guitarras.
- "Sweet child o'mine", Mi favorita, no solo de este disco, sino de todas las de los Guns. Con ese inicio que recuerda a "Baba O'Reilly" de los Who, es una canción definitiva, de aquellas que quedan para siempre. Una canción eterna.
GRAND FUNK - "We're an american band"
Es muy fácil describir como eran los Grand Funk (en principio se llamaron Grand Funk Railroad, luego se quedó simplemente en Grand Funk), uno de los grupos fundamentales de los años 70: Era un grupo de rock. Rock clásico, sin alaracas, sin contemplaciones, casi sin descanso. Lo que uno tiene en la cabeza cuando trata de definir la palabra rock. Eso eran los Grand Funk. Con un sonido deliberadamente sucio, dejando claros que a ellos les interesaba más la esencia de su música que una buena producción.
"We're an american band" se grabó en 1973 y fué la cumbre de la banda. Hasta ese disco, todos los anteriores son buenos. Los seis anteriores. Pero este es aún mejor. A partir de aquí, todo lo que grabaron fué peor. Con este disco llegaron a la cima, y de ahí en adelante todo fué un camino descendente hasta que desaparecieron. Pero vaya buenos discos nos dejaron antes de eso...
El disco es espectacular desde el principio, con la canción que da título al álbum. El inicio de este tema no puede ser más glorioso con la batería de Don Brewer en un solo inicial y el rápido acompañamiento de riffs de Mark Farner. A mi me recuerda un poco a Jimmi Hendrix sobre todo por la voz del propio Farner. Un buen solo de guitarra y un buen final hacen el resto. Pero sobre todo, esta canción nos anuncia lo que será el resto del disco: rock verdadero que no debemos perdernos. La otra canción estrella del álbum es "Walk like a man", que es otra auténtica joya del rock. Aunque solo sea por estas dos canciones ya valdría la pena el disco, pero es que el resto no se queda atrás. Quien se atreva, que lo compruebe.
GRAHAM PARKER - "Howlin' wind"
Graham Parker es un crack. Uno de los músicos que más respeto, de aquellos de los que me compro un disco a ciegas, con el convencimiento de que no me va a defraudar. Además, tiene la virtud de que sabe tocar cualquier palo con absoluta dignidad. Lo mismo el rock duro que el americana o lo que le pongan. Hace tres años sacó un disco de tipo cantautor "Your country", que era una jodida maravilla, y eso que era su primera incursión en ese estilo, nada menos que treinta años después de su debut musical... lo dicho: un crack.
La primera vez que lo escucheis (si alguna vez lo haceis), seguro que os pasará como a mi, que no sabreis bien si se parece más a Van Morrison o a los Rolling Stones. Pero lo importante no es eso, sino lo bien que se parece a quien quiera que sea. Como he dicho antes, todos sus discos son buenos, sin excepción. Y estamos hablando de unos veinte discos de estudio y otros seis o siete en directo. Pues ninguno baja del notable. Si he escogido este "Howlin wind" es porque fué su primer disco (1976), porque es quizá el que más y mejor representa a Graham Parker, y porque fué el primero que escuché, que eso siempre cuenta a la hora de ordenar tus favoritos.
Pero a pesar de realizar discos de tan buen nivel, nunca ha gozado de un éxito mayoritario. Mejor, así lo disfrutamos solo aquellos que de verdad sabemos apreciarlo.
Bajo las directrices en la producción de Nick Lowe, grabó su primer disco, este "Howlin’ Wind", disco fundacional del pub rock y obra maestra indiscutible. Es un ejemplo de disco perfecto, de obra unida, de síntesis de estilos. Entonces, ¿se trata de un disco revolucionario? ¿De una voz nueva, surgida de la casi nada? No, en absoluto.
Parker crea un estilo, su estilo, absolutamente único e identificable a través de dos influencias primordiales: Rolling Stones y Van Morrison. En la trilogía "White honey", "Silly thing" y "Between you and me" canta como el tigre de Belfast, se hace acompañar de una estupenda sección de vientos y consigue vestir del mejor rhythm and blues sus canciones. "Soul Shoes" y "Not if it pleases me" es la parte más stoniana del disco. La primera, absolutamente infecciosa, podría encajar perfectamente en "Exile On Main Street" mientras que la segunda, a medio camino entre el country y el blues, no desmerecería en "Let It Bleed" (dos de los mejores discos de los Rolling Stones, para quien no lo sepa).
Pero también hay guiños a Dylan ("Nothin’s gonna pull us apart") y acercamientos al reggae como el final de Howlin’ Wind y la descomunal "Don’t ask me questions", una de las piezas más loables, desde el punto de vista del cantautor en ciernes, y una línea de guitarra blues de Brinsley Schwarz (ver una docena con la B).
Recuerdo que yo accedí a este disco a través de un amigo que me recomendó la canción "Between you and me", un día que hablábamos de las mejores canciones de amor. Yo no la conocía y a través de ella me introduje en este maravilloso disco y a su vez, en la magnífica obra del grandioso Graham Parker, uno de mis ídolos ya a estas alturas de la vida.
GILBERT O'SULLIVAN - "The best of Gilbert O'Sullivan"
Ya sabeis que en Irlanda salen cantantes oomo boxeadores en el Bronx. Gilbert O'Sullivan es uno de tantos, pero para mí es uno especial. Lo tuve como un cantautor setentero, en el grupo de destacados en esa faceta donde figuran otros de mis ídolos como Donovan o Cat Stevens. Este Gilbert O'Sullivan se caracterizaba por ser un poco más pop que los otros. En el sentido de que hacía canciones más comerciales, pese a tener la suficiente dignidad compositiva para no ser catalogado nunca como un snob de producciones puramente comerciales, sí que se acercaba más al mainstream que sus coetáneos.
Ya sabeis que soy generalmente bastante contrario a los recopilatorios, pero ya dije en su momento que hay excepciones. Este es uno de esos casos en que prefiero un recopilatorio antes que un disco oficial de estudio. Y es que Gilbert O'Sullivan era más un artista de singles que de LPs. Y sus discos largos eran bastante irregulares. Hay algunos recomendables, pero si se quiere tener un disco verdaderamente brillante del cantautor irlandés, hay que acudir a este recopilatorio donde se encuentran todas las joyas que ha parido el piano del señor O'Sullivan.
Temas como "Nothing rhymed", "Clair", "What's in a kiss", "No matter how I try", "Get down", Happiness is me and you", y sobre todo la grandiosa "Alone again (naturally)" justifican absolutamente hacerse con este recopilatorio imprescindible.
3 comentarios:
Como te lo curras Lolo,felicidades otra vez.Siempre he envidiado tu capacidad para transmitir(con perdon por mi peloteo almorta).Ademas te adaptas de puta madre a los nuevos tiempos y manejas a tu antojo las nuevas tecnologias.Quiza el nivel que demuestras sea una de las causas de la baja participacion de los componentes de este local,no se yo
por chinchar un poco que no quede..
se que soy el menos apropiado para hablar pues soy el ultimo en incorporarme a este blog.
Quiza otro motivo sea algo parecido a lo mio(lo dudo) que me cuesta un huevo y parte del otro el
tener que redactar un texto.Entre las faltas de ortografia y el lio que me hago para no decir nada, pues eso.
Felix no me acorde que el viernes ya tenia comprometida una cena,de todas maneras nos vemos el jueves y hablamos.
Quique la idea de Felipe(y en la cual me a dejado solo)de tirarte de la lengua no a causado efecto,lo entiendo,todo lo dicho sobre el equipo del escudo de
Batman es demasiado evidente,me falta sutileza y habilidad.
Bueno Lolo te sigo peloteando,
espero que te sirva de algo ver que hay almenos un comentario despues de un post tan currado.
Asco:
Los cabrones que descolocan todo en
el corte ingles sin ton ni son
Los cabrones que van a dar el coñazo al corte ingles por que no les aguantan ni en su casa.
Hola.
Kontalante, Felipe, no os sintáis abatidos, porque sí causó efecto: me hizo sonreir un rato.
Lolo, joder, no sé los demás, pero es que no tengo mucho (ni poco) que comentar a estos artículos tuyos. Apenas conozco a alguno de los grupos o solitas que mencionas y de oídas.
Te propongo un juego: a partir de ahora, metes de clavo a un grupo inventado que no exista; lo que escribas va a colar, fijo, y en el post siguiente das la solución, a ver quién acierta.
Salud.
Lo que he escuchado de Gov`t Mule me ha gustado mucho, sin embargo lo de Gorki`s Zigotic Mynci, no me llegó mucho.
Gigolo Aunts seguro que me gustaría, si va en la onda de los Teenage y los Fountains, y por lo que escribes los Grand Drive también.
Nada, sólo darte las gracias por el esfuerzo y el proceso de evangelización que estás llevando a cabo...je,je
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