Una docena con la J (here we go again)

Vuelve la serie más seguida por los miles de fieles lectores de este blog. Siguiendo el alfabeto escrupulosamente, ahora vendría la letra "I". Pero he decidido que las letras que tienen demasiado poca chicha las juntaré en varias, para que tengan su espacio, pero que el post tenga a su vez el suficiente nivel. Su pusiera 12 con la I, saldrian al menos cinco o seis discos más bien regularcillos, y no quiero bajar el nivel, así que prefiero agruparlas.

Por eso paso directamente a la J. Y aqui si que hay grupos e intérpretes para dar y tomar. Discos maravillosos para elegir, muchos más que doce. Siguiendo el método que vengo aplicando desde el principio, no voy a poner estrictamente los que me parezcan los doce mejores, sino que voy a intentar en la medida de lo posible que el abanico de estilos y de épocas toque un poco todas las aristas musicales.

Antes que nada, como siempre, un breve apunte sobre grupos o artistas que se han quedado fuera porque solo caben doce, pero que son lo suficientemente importantes como para que sean citados, o que me gustan a mi lo bastante como para que quede constancia de ello.


- JANE'S ADDICTION.- Grupo ochentanoventero, que hacían una especie de híbrido entre hard rock, punk y folk. Una cosa bastante rara pero con sorprendentes resultados. A los interesados les recomiendo fervientemente los discos "Ritual de lo habitual" y "Nothing's shoking". Valen la pena.

- JOHN CALE.- Un dinosaurio de la música. Lleva unos cuarenta y cinco años en el oficio. Pasa por ser uno de los músicos más influyentes de la historia del rock underground. Miembro de la Velvet Underground, su carrera en solitario ha sido muy larga, irregular, con discos sublimes y otros indignos de ser suyos. A destacar, los maravillosos "Paris 1919", "Helen of Troy", y para citar uno bueno de los más recientes, "Hobosapiens".

- JOSH RITTER.- Gusto personal. Un cantautor actual del folk americano que se hace ahora. Tiene varios discos muy buenos pero mi preferido es el "Hello Starling".

- JOHNNY WINTER.- Otro dinosaurio. Desde los años sesenta firmando soberbios discos de blues eléctrico. Si te gusta ese estilo, imprescindible.

- JAMES YORKSTON.- Debilidad personal. Cantautor folkie escocés, realiza discos acústicos, oscuros, preciosos pero poco accesibles. Para escuchar y deleitarse en momentos muy concretos. Especialmente "Just beyond the river" es una joya.

- JIM CUDDY.- Otro cantautor de estos que me gustan a mí. Este es americano y se nota porque su estilo roza el country, aunque también tiene mucho de pop. Escuchad el "All in time" y sabreis lo que es el pop-rock americano con raíces de la mejor calidad.

- JOHN COUGAR MELLENCAMP.- Un grande desconocido, de los muchos que hay, por desgracia. Si os gusta Bruce Springsteen, este le da réplica perfectamente. Desde los años 70 hasta la actualidad haciendo muy buena música. Si os quereis acercar a él, aconsejo comenzar con sus discos ochenteros, especialmente "The lonesome jubilee" y "Scarecrow".

- JOE COCKER.- Un grande, desde luego. Pero nunca me terminó de llenar. Le reconozco su calidad interpretativa, pero poco más. Especialista en versiones, consiguió mejorar la mayoría de las que interpretó, cosa que no está al alcance de cualquiera. Su época más bluesera es mi preferida, o sea, sus primeros discos.

- JOE HENRY.- Me gusta mucho, y tiene discos muy variados. A veces escuchas dos y parece mentira que los haya hecho la misma persona. Algunos discos suyos son marcadamente de country-raíces, otros de americana, y algunos tienen mucho de jazz o blues. Mis favoritos son el espléndido "Short man's room" y el espectacular y sorprendente "Tiny voices". Joder, que nivel tiene que haber en la J para que me haya dejado a este fuera de los doce...

- JOHN MAYALL.- Otro grande muy grande. Posiblemente el mejor músico de blues blanco de la historia. Es que ¿qué puedo decir de John Mayall? Si os lo tengo que explicar, mal vamos. Es historia viva de la música. Tiene un disco con Eric Clapton, el famosísimo "Bluesbreakers" que es oro puro.

- JAMES BROWN.- El padrino del soul. ¿Alguien no conoce a James Brown? Te puede gustar o no, pero al oir su nombre hay que ponerse de pie.

- JEFF BECK.- Y seguimos con monstruos de la música. Jeff Beck es, así como suena, uno de los mejores guitarristas de la historia. Formó parte del grupo en el que se juntó más talento guitarrístico de toda la historia de la música: el grupo Yardbirds, en el que figuraban Jeff Beck, Eric Clapton y Jimmy Page, casi nadie al aparato.

- JOHN COLTRANE.- Me declaro un ignorante en materia de jazz. Pero hasta a mí, que no tengo formación jazzística ni conocimiento para entenderlo en su magnitud, me asombran músicos como este. Un saxofonista sensacional y un músico eterno. No será fácil que os guste, pero dadle una oportunidad.

- JOY DIVISION.- No son mi estilo, pero hay que admitir que los Joy Division fueron uno de los grupos británicos más importantes del postpunk, y además se hicieron míticos por la personalidad de su lider Ian Curtis, cuyo final trágico también influenció para que el grupo se convirtiera en leyenda. Su disco "Closer" me gusta incluso a mi.

- THE JAM.- Uno de los grupos más importantes de los años finales de los setenta y principios de los ochenta. Coqueteando con el punk y el power pop, The Jam grabaron unos discos acojonantes, sobre todo gracias a la calidad musical de su lider Paul Weller (que luego siguió en solitario, y aún continua grabando estupendos discos). "All mod cons" es us disco bandera.

- JUDAS PRIEST.- Heavy metal del bueno. Empezaron en los setenta, que es cuando hicieron sus mejores discos. El directo "Unleashed in the East" fué mítico en mis tiempos.

- JIM WHITE.- Otro cantante de folk raro y Lo-Fi de los que me gustan a mi. El "No such place" me enganchó, y los discos posteriores no le hacen de menos.

- JACKSON BROWNE.- Aunque solo fuera por la versión de "Stay" que tantas veces bailamos en nuestra adolescencia, Jackson Browne tenía que estar aquí. Para quien quiera profundizar en él, recomiendo "Late for the sky".

- JONNY LANG.- En el año 97, Jonny Lang dejó perplejos a los aficionados a la música publicando su disco "Lie to me", un álbum fantástico, especialmente si tenemos en cuenta que el canadiense tenía solo 15 años!. Desde entonces su carrera ha sido irregular, algún disco muy bueno y también varios flojos. Desde luego, no parece que llegue a tanto como prometía, pero ese "Lie to me" por sí solo ya vale mucho la pena. Blues eléctrico del bueno.

- JOLIE HOLLAND.- Me gusta mucho esta intérprete de folk-jazz. Discos de mucho nivel, todos los que tiene, que creo que son cuatro. Mi preferido: "Escondida".

- J. GEILS BAND.- Grupo rockero de los años setenta, de esos que llamo "de mi época". No se porqué, ya que mi época son todas las décadas desde los setenta hasta ahora, pero bueno. La banda de Peter Wolf me gusta bastante, rock con un toque blues. Muy buenos. El mejor disco, el primero, que lleva el nombre del grupo.

- JOHN DOE.- Cantautor de folk-rock. Su "Dim stars, bright sky" lo tengo como disco de culto personal.

- JESUS AND MARY CHAIN.- Post-punk de los ochenta, un grupo definitivamente importante, aunque la verdad, nunca me terminaron de convencer. Sin restarle méritos. Su "Psychocandy" vale la pena.


Y vamos con los 12 del podio. A partir de ahora voy a intentar, aparte de mi comentario de cada disco, poner un enlace de descarga, para quien quiera bajarse el disco en descarga directa, sin necesidad de Ares o Emule. Más fácil ya no os lo puedo poner. Al lio:



JOHNNY CASH - "At Folsom prison"







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No se entendería la música americana sin la figura de Johnny Cash. Decir que era un cantante country no le hace justicia. Johnny Cash era mucho más que eso, y ha influenciado a muchísimos músicos. Este disco, grabado en directo en la cárcel de Folsom, ha pasado a la historia como uno de los discos en directos más importantes de la historia. Lo he elegido por eso, por la importancia que tiene. No es un disco, es una leyenda.

Situémonos en el tiempo del disco: Johnny Cash de la vuelta de casi todo, prácticamente agotado, sin rumbo, adicto al cóctel estimulantes/tranquilizantes; decide repentinamente dar un concierto en la prisión de Folsom y grabarlo. Es muy importante tener en cuenta lo que se cocía en la época, a saber: ése año vieron la luz discos como “el blanco” de los Beatles, "Electric Ladyland" de Hendrix (luego hablamos de él), "Beggar’s banquet" de los Stones, el "Village Green" de los Kinks, así como joyas escondidas de la talla de “The family that play together” de Spirit o el "Mr. Fantasy" de Traffic. También salieron grandes discos en directo, como el "Super Session" (Bloomfield-Kooper-Stills). Y en ese preciso momento llega el amigo Cash para reinventar la música country, pasada por la trituradora, y rodeado de presos.

El repertorio de canciones es abrumador, aunque creo que es lo de menos, gracias a la interacción que logra con ese público tan particular. Pero desde la inicial "Folsom Prison Blues", pasando por la estremecedora "Dark as the Dungeon" y la irresistible "I Still Miss Someone" (un minuto y medio en el que se dice casi todo) para arrasar con la alocada "Cocaine Blues", la genial "25 minutes to go", y así uno tras otro, los temas se suceden entre comentarios de Cash con los presidiarios. Es una auténtica pasada.

"At Folsom prison" es uno de esos álbumes que trascienden lo estrictamente musical para brindar al oyente la oportunidad de sentirse parte de la historia. Uno cierra los ojos y se imagina en medio de los reclusos gritando como un poseso cuando Cash canta eso de "Disparé a un tipo en Reno sólo por verle morir".

Quien haya visto el biopic "En la cuerda floja" (Joaquin Phoenix está muy bien en el papel de Cash) necesitará este disco como el comer.




JELLYFISH - "Split Milk"






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He aquí un grupo realmente especial. Apenas hicieron un par de discos, luego se separaron y sus miembros formaron otros grupos a su vez, ninguno de los cuales tuvo demasiado éxito. En cambio, Jellyfish fué algo bárbaro. Especialmente este disco que ha puesto aquí, que me parece una maravilla, una obra maestra.

Aquí tenemos un grupo americano sonando a ratos como los Beatles, a ratos como Queen, incluso como los Beach Boys y con producciones tipo ELO. Casi imposible de encontrar en España, lo tuve que comprar por Amazon. Aquí tenéis pop auténtico, de calidad. Las letras también tienen su coña, con una canción dedicada a la masturbación ("He's my best friend")

Quizás la mejor banda de Pop de los 90, los maravillosos Jellyfish, con solo dos discos a sus espaldas; “Bellybutton”, bajo el control total de Jason Faulkner y “Spilt Milk” con la inestimable cooperación de Jon Brion, una especie de Arquímedes del Pop.

Cuando los Jelly clavan una canción (y es lo que suele ocurrir), te dan todo a lo que uno puede aspirar del género: buenas letras, arreglos imaginativos, armonías vocales aéreas, transiciones melódicas memorables, riff roqueros decibélicos, bass and drums, en fin, que no hay por donde criticarlos.

Cuando pongais el disco (si es que lo haceis), seguramente más de uno a los treinta segundos de empezar a sonar el disco pensará que se ha equivocado y en realidad ha puesto un disco de Queen. No es cierto, pero si es verdad que si hay un grupo que se parezca o tenga puntos en común con Queen, es éste. Diría incluso que si metemos la música de Queen y la de los Beatles en una coctelera y agitamos, saldría este disco.




JANIS JOPLIN - "Pearl"





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Recuerdo perfectamente mi primer contacto con la música de Janis Joplin. Años setenta. Me grabaron una cinta variada con canciones de Janis Joplin, una especie de grandes éxitos caseros: Me and Bobby McGee, Mercedes Benz, Cry baby, Piece of my heart, etc., las mejores, vamos. Y el caso es que no me gustó. Yo era un chavalín y no entendía nada de blues, y lo único que tenía claro es que esa voz cazallera me desagradaba. Hoy en día abomino de aquella percepción. La manera de interpretar de Janis Joplin es irrepetible. Ha sido la mejor en su género indiscutiblemente, y su prematura muerte tiene poca culpa de que esté mitificada. Si lo está es, fundamentalmente, por su calidad interpretativa. Cantaba con más cojones que cualquier tio.

Su música era aunténtica, íntegra. Su voz le salía de las tripas, y cada canción cantada por ella era una puñalada en el alma de los que la escuchamos. Esa música mezcla de rock y blues, con claras raíces negras, se hacía más grande cuando era cantada por ella.

En cuanto a sus discos, recomiendo cualquiera de ellos, todos son buenos. Y tiene algunos recopilatorios excelentes. Pero me quedo con "Pearl" porque, aparte de ser un soberbio disco, contiene lo último que grabó. De hecho, salió a la venta cuando ya había muerto Janis. En septiembre de 1970, se trasladó a Los Angeles a grabar "Pearl" con su nuevo grupo. El 4 de octubre de 1970 había sido un buen día de grabación, se fue de copas y se emborrachó. A la 1:40, según el forense, murió por sobredosis de heroína. Janis ya había pasado por experiencias similares y había salido con vida, pero esta vez no hubo nadie para ayudarla. Descubrieron su cuerpo unas 18 horas después. La droga que la mató era de una pureza extrema (tenía el 40% de pureza, mientras que lo común sólo es del 2%). A las seis semanas de su muerte, salió el disco "Pearl", que fue un éxito y se mantuvo en el número uno de ventas durante 14 semanas. Como homenaje, se dejó el tema "Mercedes Benz" a capella, sin música, ya que fue la última canción que Janis grabó; asimismo, se incluyó la canción "Buried Alive in the Blues" sólo con música, sin la voz de Janis que habría debido cantarla.

Muy mal os querría yo si no os recomendara este disco.




JAMES - "Pleased to meet you"






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Supongo que más de uno se preguntará como es posible que me guste un grupo como James. A veces yo también me lo pregunto. Y me respondo diciendome que esta es una de las causas por las que no tengo un estilo de música favorito y hay muy pocos que descarte completamente. Que un grupo de pop alternativo, medio electrónico como James me guste a mi es la prueba de mi eclecticismo musical, y que cualquier disco con buenas canciones me puede gustar.

Y este disco de James no es un caso único, otras obras de su discografía como "Seven" o "Laid" me gustan mucho también. Pero me quedo con este "Pleased to meet you", al que en su momento califiqué como el mejor disco del 2001.

Es un discazo que comienza con "Space", una canción atmosférica y potente, que anuncia un poco lo que va a ser el disco. Desde ahí hasta el final todo es bueno. Puestos a destacar canciones, está "Junkie", una canción especial, muy bien interpretada por Tim Booth, "Thr Shining", que entra a la primera y es una preciosidad de canción, "English beefcake", gloriosa, y sobre todo, la canción definitiva de James, posiblemente mi favorita de la historia del grupo: "Getting away with it". Me encanta esa canción, con ese crescendo imparable. Un single perfecto. El disco acaba con "Alaskan pipeline", una canción atmosférica como la primera, con un aire de tristeza. Una tristeza que solo se te pasa volviendo a poner el disco.




JIMI HENDRIX - "Electric Ladyland"







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Todos habeis oido hablar de Jimi Hendrix, de eso estoy seguro. De lo que no estoy tan seguro es de que todos le hayais escuchado. No se como explicaros lo que Jimi Hendrix significa para el rock. Jimi Hendrix es una cosa y el resto del mundo musical otra, y si alguien no lo entiende solo tiene que escuchar este disco.

Para mi es el mejor álbum de estudio del guitarrista zurdo más genial de la historia. Posiblemente algunos discos en directo sean algo superiores, pero de los que grabó en estudio, yo creo que este es el mejor.

Si en sus anteriores trabajos el gran James Marshall Hendricks y sus chicos de la Experience habian dejado al mundo boquiabierto, en este disco, que vio la luz en pleno año 1968, tan convulso, con las revueltas estudiantiles, el amago de revolucion en el Mayo frances ("Debajo de los adoquines está la playa") y la abortada primavera de Praga, "Electric Ladyland" aparece para cerfificar quien es el que manda en el mundo de la guitarra eléctrica.

A la habitual ración de blues, rock, psicodelia y ruidismo y distorsion, el extraterrestre conocido como Jimi Hendrix le añade un "algo" indefinible que eleva su nueva obra a niveles insospechados. Larguisimos solos, melodias alucinantes, ruido, magia, virtuosismo, fuego, pasión, técnica, todo esto y mucho más se condensa en este álbum. Por otra parte, jamás una portada tan fea (la cara de Jimi en pleno orgasmo musical) ha definido mejor lo que contiene un disco, una orgía sónica, pura locura.

Hay canciones mas bluseras, como "Have you ever been" o por supuesto la madre de todas las canciones: "Voodoo Chile", una locura de 15 minutos grabada con altas dosis de improvisación.

Ritmos imposible para el rock de la época hacen aparición en canciones como "Gypsy Eyes" (parece que sus raíces cherooke se manifiestan en este tema) o "All along the Watchtower" (probablemente la mejor versión de un tema de Dylan jamás realizada), guiños al jazz de Miles Davis en "Rayny Day, Dream Away", toques de rock tradicional en "Come On (Let the good times roll)", revisión del rock lisérgico en "1983...(A merman I should turn to be)"...

De todos modos, como ya he dicho, en este disco, al igual que en la obra misma de Jimi Hendrix en general, existe una evidente fusión y mezcla de estilos, muy natural y en absoluto forzada, ya que para alguien como él y su banda no era nada difícil hallar los puntos de conexión que unen al blues con el rock, el jazz o la música tradicional americana, y por tanto, mas que canciones claramente definidas en un estilo concreto, a pesar de que las hay, no suelen ser puras, sino que aparecen "contaminadas" por asi decirlo, en un afán manifiesto por innovar.

En definitiva, si te gusta el buen rock, "Electric Ladyland" te va a volver loco; y si no, ¿realmente crees que mereces tener oídos?




JOSH ROUSE - "1972"





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Compré este disco, recién salido, por recomendación de Joaquín, el dueño de la tienda Rock and Roll Circus. Creo que ya os he hablado de él algunas veces. Me ha sacado los cuartos bien, a cambio de descubrirme discos maravillosos. Cuando me habló de Josh Rouse no tenía ni idea de quien era este músico. Pero como de costumbre, no me equivoqué al seguir su recomendación. Menudo descubrimiento. No es que descubriera un gran músico, es que descubrí uno de los discos de mi vida.

Para quien no le conozca, Josh Rouse es un cantautor un tanto peculiar. Mezcla estilos como el folk, pop, gospel, americana, en fin, de todo. Pero la clave está en mezclarlo bien. El resultado es un disco irrepetible, perfecto.

Ya desde el título y la portada, este disco es toda una declaración de principios: recrear una época concreta en todos sus aspectos. Y ciertamente consigue evocar el espíritu de los setenta mediante la exquisitez de sus arreglos: brillantes secciones de cuerda, fraseos de vientos, percusiones marcando el tempo con triángulo... todos los elementos casan a la perfección para homenajear al año en el que nació.

El disco mantiene un curioso equilibrio entre el soul, el blues, el pop y el folk. Se puede decir que bebe de todos los géneros norteamericanos por excelencia. No hay que olvidar que el disco suena a mitos del tamaño de Nick Drake o Jackson Browne, claras influencias en la música de Josh Rouse.

Lo que en un principio comienza tranquilamente con el tema que da nombre al disco, "1972", sube de intensidad nada más comenzar "Love Vibration", primer y acertado single: una sabia mezcla entre un ritmo constante y casi percutido, y sustanciales cambios de intensidad. "Sunshine" es un tema pop alegre y vitalista, bastante convencional, pero brillante. En mis primeras escuchas fué mi tema favorito del disco. Con "James" llega uno de los momentos álgidos del álbum: es una de las canciones que tiene unos arreglos más setenteros y en los que el falsete de Rouse es acompañado maravillosamente por unos suaves sonidos de flauta travesera. Justo después nos llega "Slaveship", toda una declaración de amor con estructura de blues en el que es difícil evitar el movimiento de los pies lanzándose a bailar introducidos por el piano. Lo mismo sucede con "Come Back", pero esta vez lo que nos arrastra es el groove del bajo.

Sin duda alguna, el tema más sensual del disco es "Under Your Charms", prácticamente un homenaje a Marvin Gaye. Los tres temas que cierran el disco son otras tantas joyas: destacan la percusión y el contrabajo de "Flight Attedant" (a dia de hoy, mi favorita del disco), el coro gospel de "Sparrows Over Birmingham" o la aparente sencillez de "Rise".

Joder, menuda obra. Josh Rouse logró uno de esos discos redondos que se pueden dejar sonando a todas horas sin que uno se canse de él. Son apenas cuarenta minutos, tan sólo diez canciones, pero con las que no se puede parar de disfrutar de la música. Y además, estoy casi seguro de que gustará a todos, es el típico disco que puedes regalar a ciegas a cualquiera sin miedo al error. Que suerte teneis los que vayais a descubrir esta maravilla ahora.




JEFFERSON AIRPLANE - "Surrealistic pillow"





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Estudiaba yo segundo o tercero de BUP cuando esta joya cayó en mis manos, en formato de vinilo. Aún recuerdo al compañero de clase que me prestó el disco. Yo apenas sabía nada de esta banda Californiana, mis gustos se decantaban más hacia los grupos británicos, pero los Doors y los Byrds me habían ido abriendo la curiosidad sobre que se cocía en la costa oeste durante los 60’s. Si se podría sintetizar el llamado “sonido San Francisco” en un solo álbum, sin duda alguna, estaríamos hablando de este disco.

Se trata del segundo trabajo de la banda de San Francisco y primero con Grace Slick, la cantante, quien aporta dos temas básicos en la discografía del grupo... "Somebody to love" y la psicotrópica visión de Alicia en el País de las Maravillas: "White Rabbit".

Excelente trabajo tanto a nivel compositivo como interpretativo, solo tenemos que escuchar como suenan las guitarras de Paul Kantner y Jorma Kaukonen o las melodías de bajo de Jack Cassidy, con las fantásticas armonías vocales de Grace Slick y Marty Balín, del cual cabe destacar su propia aportación compositiva en las preciosas baladas "Coming back to me" y "Today", tema de extraordinaria belleza, o las rockeras "3/5 of a mile in 10 seconds" y "Plastic fantastic lover". También es destacable el tema "My best friend", obra de Skip Spence, miembro fundador de los Jefferson y que por aquellos días ya estaba con su siguiente banda, los psicodélicos "Moby Grape". Por cierto, que de Skip Spence ya recomendaré en su momento su fantástico disco "OAR".

"Surrealistic Pillow" es un disco que huele en ciertos momentos a otras bandas de gran nivel y parecido estilo como "Buffalo Springfield", "The Byrds", "Mama’s & the Papa’s" o incluso a "Simon & Garfunkel" en el tema acústico "Embryonic journey", de impecable ejecución a manos de Jorma Kaukonen.

Disco histórico, se hace necesario en vuestra discoteca.




"THE JAYHAWKS - Tomorrow the green grass"





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Los Jayhawks son mi grupo favorito de los últimos quince años. Afirmación rotunda por mi parte. Ellos tienen la culpa del giro que pegó mi gusto musical hacia el folk pop y el alt-country. Y todo nació con este disco. Me lo grabaron de mala manera, sin carátula ni hostias, pero joder, qué efecto me produjo. Es de aquellos pocos discos que en su primera escucha ya me parecía que estaba ante un clásico. Es como si todas las canciones, que escuchaba por primera vez, ya fueran conocidas por mí. Algo muy especial, que me ha sucedido muy pocas veces.

A ver como os hablo de los Jayhawks y de este disco sin que la pasión me pueda pero con la suficiente elocuencia como para que comprendais cuanto me gustan. Probaré: Este es el disco que los Beatles habrían grabado si hubieran seguido juntos en 1995. Creo que esa frase lo define bien. Probablemente Gary Louris y Mark Olson son los Lennon y McCartney de los años 90, al menos a nivel compositivo.

Aunque antes de este disco ya habían dado muestras de su calidad (el "Hollywood town hall" también es magnífico) aquí los Jayhawks consiguen un disco sólido y preciosista, donde quizá lo único criticable sea la portada, una especie de velado y descolorido homenaje al "Wild Life" de los Wings. Las guitarras y las voces de Louris y Olson suenan mejor que nunca, y el fichaje de Karen Grotberg en los teclados se deja notar positivamente.

Las composiciones son descomunales, prácticamente se podría decir que son un single tras otro: empezando con la maravillosa "Blue", una de sus canciones más emblemáticas, la lista de temazos no decae. En mi opinión las siete primeras canciones son espectaculares, maravillas como "I'd Run Away", "Miss Williams' Guitar" (dedicada a Victoria Williams, esposa de Olson), "Two Hearts", "Over My Shoulder"... todas, vaya. Pero es que aún nos queda casi medio disco más, donde destaca la melódica "Nothing Left To Borrow".

Y, llegados aquí, ¿qué más se puede añadir sobre este disco? Que me encanta, que es una obra imprescindible, que nadie debería dejar de escucharlo, y que los que no conozcan aún al grupo y degusten este manjar, querrán hacerse inmediatamente con el resto de su discografía. Avisadme cuando llegue ese momento, que los tengo todos.




JETHRO TULL - "Aqualung"





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Que discazo. Jethro Tull no es una banda para todos los públicos, ya lo anticipo, pero a mi me ha conquistó con este álbum, ya hace muchos años.

Se podría decir que este disco marco un pequeño giro de la banda desde el folk al rock, aunque los Tull siempre se han caracterizado por su mezcla de estilos que hacen su sonido tan reconocible.

Como preludio al "Thick As A Brick", el famoso disco del periódico (por la portada), Jethro Tull lanzó en marzo de 1971 "Aqualung", para mí lo mejor de su discografía.

Entre los mejores temas, tenemos obviamente "Aqualung", es el tema que abre el álbum, de 7 minutos, una especie de mini ópera que empieza con un precioso piano y con guitarras suaves y termina como una gran explosión de batería y guitarras eléctricas. Tenemos también a "Cross-eyed Mary", gran canción en la que destaca la fabulosa flauta de Ian Anderson.

Otra canción es "Locomotive Breath", que nos lleva al lado más oscuro del disco. Es una canción con la que uno siente ese vigor que nos da no sólo el rock que uno escucha, sino además el ritmo y versatilidad de la flauta de Ian Anderson. "Wind Up" es el tema que cierra el disco y es tanto alegre con sus movimientos como triste en su inicio y su final.

Como dato curioso, señalar que la vez que Jethro Tull grababa este álbum, en el mismo estudio, grababa también Led Zeppelin su enigmático cuarto álbum.

Os invito a adentraros en este grupo que ha sido catalogado muchas veces como folk progresivo por muchos críticos y que indiscutiblemente ha dejado su sello en la historia de la música.




JEFF BUCKLEY - "Grace"





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El otro día comenté con Fernando este disco. Maravilloso disco. Llega el momento de extenderse y recrearse en él. Para quien no lo sepa, Jeff Buckley (hijo del también cantante Tim Buckley) murió trágicamente y este fué su único disco de estudio editado en vida. Nunca lo sabremos con certeza, pero yo apuesto a que de seguir vivo habría sido uno de los músicos más importantes de la historia.

"Grace" es un disco inconmensurable. Empieza con "Mojo pin", una atmósfera que se abre paso con una voz suave que va entrando, nos invita a adentrarnos en su mundo, y embriagados con sus susurros nos rompe el alma con sus desgarros... afinados y calculados, para que nuestro vello se ponga como escarpias... gritos calculados con la batería, golpe de baqueta, golpe de voz, golpe y golpe, y cada vez más sincopado y más mortal. Es uno de los mejores inicios de disco que recuerdo haber escuchado, refleja perfectamente todo lo que nos vamos a encontrar a lo largo del resto de canciones: una voz mágica cargada de intimismo, un sonido realmente genial. Solo ha empezado el disco y ya estamos con el alma en vilo.

Luego llega "Grace", la canción que da nombre al disco, con bonitas guitarras, otra vez una voz suave, otra vez melodías extrañas con una voz que hace cosas incomprensibles y lo hace con unas caídas y subidas de lo más estrambóticas, con una voz en falsete que recupera la gravedad y vuelve a falsear y a jugar, y hace todo eso sin perder el sentimiento. Muy buena canción, excelente interpretación.

A continuación, "Last goodbye". Comienza realmente genial, con un riff estupendo hasta que comienza la voz de Jeff, una voz que cala hasta los huesos, más incluso en este tema, uno de los mejores del disco. Mención aparte los magníficos arreglos de cuerda.

Y empieza "Lilac Wine", triste, emotiva, con una voz que te acaricia, que te mece, y te coge de la mano. Se trata de uno de los temas más suaves y delicados del disco. Preciosidad.

"So real" es un tema con dos caras, una melancólica y suave, y otra más potente, con guitarra eléctrica chirriante al más puro estilo rock. El estribillo es de lo mejor del disco.

La siguiente es "Hallelujah", el tema de Leonard Cohen mejor interpretado que nunca. Uno de los mejores momentos del disco. Brillante y conmovedora.

"Lover you should've come over", canción depresiva, como todo el disco. Con toques folk, la canción llega directamente al alma.

"Corpus Christi Carol" empieza con punteo de guitarra y voz casi gregoriana, limpia, sin aire. Es una canción durilla, puede llegar a ser considerada una de las peores del disco, pero tiene su belleza, su voz... con esa especie de guitarra que parece más un arpa, parece un cántico de iglesia, pero ya te lo avisa el titulo no

"Eternal life" es sin lugar a dudas el tema más potente del disco. Mucha guitarra, mucha energía contenida, que se descarga dando lugar a un tema rock.

Y todo acaba con "Dream brother", música étnica, atmosférica, otra vez la guitarra... va elevándose junto a la batería y sus pequeños redobles que van siendo más sonoros. Otra vez la voz entra, la batería toma un aire étnico junto con los acompañamientos, platos que suenan extrañamente. De repente la voz sube y luego se convierte en cantos exóticos y en falsetes, y parece que vaya a bailar el baile de los 7 velos cuando la música cambia al cien por cien y la guitarra se vuelve grunge, y la batería juega y ahora parece que estemos en los setenta...

Un disco absolutamente imprescindible para quellos que realmente se consideren amantes de la música, y es que "Grace" lo tiene todo para convertirse uno de los discos favoritos de cualquiera. Especialmente recomendable para los momentos de depresión o tristeza profunda, "Grace" te implicará desde la primera escucha en el alma de Jeff, otro genio que podría haber llegado a ser mucho más que el autor de un solo disco, pero que desgraciadamente se quedó en el camino, no sin antes dejarnos con esta joya. Otros, ni en siete vidas se acercarían a crear algo así.




JOHN LENNON - Imagine





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Hasta el último minuto he dudado entre "Imagine" y el "Plastic Ono band". Me parecen ambos excepcionalmente buenos, y de similar calidad. Pero "Imagine" es, indiscutiblemente, más mítica. Por otra parte, era una tentación poner el otro, porque sería quizá descubriros algo nuevo. Pero en fin, nos quedamos con este.

El disco se abre con "Imagine", seguramente una de las canciones más conocidas de la historia, es básicamente una declaración utópica de paz y buenas intenciones hacia el mundo, acompañado de un piano y una sección de cuerdas. No es necesario ahondar mucho mas. "Crippled inside" y su contagioso folk/rock es una pieza muy interesante, con George Harrison tocando el dobro, lo cual le da el detalle que distingue la canción y le da un toque muy particular. "Jealous Guy" es una balada de hermosa instrumentación e interpretación vocal de Lennon y su característico efecto doble vocal. El resultado es conmovedor y uno de los mejores momentos del artista, a mi juicio.

Tratándose de John Lennon, en alguna parte del disco tenía que encontrarse la canción rockera de rigor, y llega en el bluesero "It's so hard". Los acordes de guitarra blueseros, intercalados con la voz rasposa de Lennon y el saxo de King Curtis le dan la energía necesaria al tema. "I don't want to be a soldier mamma" es el manifesto político del album, evidentemente antibélico, tiene una musicalización con bastante trabajo de muro de sonido (supongo que sabeis que el productor era Phil Spector) con bastante eco y efectos psicodélicos, que redondean un matiz en el disco. No es de sus mejores temas pero es bienvenido. "Gimme some truth", mas en la vena clásica de composición Lennon, en lo referido a los coros y estructura, la guitarra manda a lo largo de la canción, enérgicos acordes, muy buen solo de guitarra eléctrica cortesía de Harrison nuevamente.

"Oh my love" baja considerablemente las revoluciones, ya que es una delicada composición dedicada a Yoko Ono. Piano, bajo, campanas tibetanas y una muy delicada guitarra acústica acompañan. "How do you sleep" es una serie de ataques a Paul McCartney, ya que según Lennon había sido atacado primero en referencias del álbum "Ram" de Paul. "How" es una de esas canciones en las que uno se queda preguntando: ¿como cojones esta canción no se convirtió en otro clásico de Lennon?, tiene todos los elementos: delicada instrumentación, estructuras fáciles de digerir, cuerdas que endulzan y suavizan el dolor que Lennon quiere transmitir, etcétera. En suma, una muy buena canción, que no recibió mucha difusión, pero quizá así sea mejor. "Oh Yoko" cierra el disco y es una alegre canción, con guitarras acústicas como protagonistas y una oda a la felicidad que su amor por Yoko Ono le hacía sentir.

"Imagine" es, quizá, un disco mas digerible en comparación con el otro que he mencionado, mucho mas cuidado en pulir el sonido y armonías, endulzarlo con cuerdas, que ayudó mucho a relanzar la carrera de Lennon en su momento a nivel comercial. Pero cuidado, por ser comercial no es un mal disco, en absoluto. Al contrario, la gran mayoría de las canciones están muy bien producidas y ejecutadas, la composición en general es brillante y contiene varios de los temas que eventualmente confirmarían el status de "Imagine", como uno de los discos capitales de la carrera de Lennon como solista y uno de los mas importantes de su década.




JOHN HOWARD - "Kid in a big world"





No encuentro ningún enlace para descarga directa, lo siento. Pero lo tengo, si alguien lo quiere, lo puedo grabar.


John Howard es un músico casi desconocido, que vertió toda su creatividad en una exigua cantidad de canciones, pero que presentó un nivel altísimo en este disco de tardío Glam Rock. Un par de años después de que despertase el sonido que caracterizó álbumes como "Ziggy Stardust" de Bowie, "Slider" de T.Rex o "Honky Chateau" de Elton John, este sofisticado británico enmarcó una serie de composiciones en un trabajo apasionado y lánguido, el único que editó, que rebosa sensibilidad y pop hermoso y decadente.

Vocalmente es tremendamente similar al joven Elton John, pero sus melodías se equilibran entre el Bowie mas glamuroso y la Roxy Music mas temperamental. Un encantador maldito para descubrir treintaytantos años después. Yo que vosotros, no me lo pensaría.

El disco es sencillamente espectacular. Lo escuchas y parece mentira que en su momento (1974) pasara totalmente desapercibido. Es impresionante, y lo es hasta tal punto que lo he metido aquí al lado de estas otras once joyas. Si alguien lo escucha, a ver si tiene huevos de decirme que miento.



Para terminar, un regalo para los que os hayais perdido el Muchachada Nui de anoche. El Celebrities sobre Miguel Indurain, en el que desvela, entre otras cosas, que Perico Delgado llegó tarde a la salida del Tour del 89 porque se fué a hacer fotocopias.